Éste deseo, fuerte como los ríos y mares de todo el universo,
éste amor indomable que ya no es ni bestia ni hombre,
éste caos inmenso que sólo responde ante tus besos,
me arrastra sin piedad ante la tentación de tu recuerdo
Pero es inútil querer tocarte, cuando eres sólo un sueño
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